Al lado del camino. cronicas desde la periferia

domingo, junio 24, 2007

PRINCIPIO DEL OLVIDO V

Y nada cambio,

Las rosas siguieron siendo rosas

Los epistolarios se oyen en el mundo

A ras de la tierra,

Los ojos no se borran ni las bocas

Se cumplen al final del día.


Nadie detiene a los autos

Las penas siguen siendo heridas,

Palabras que cuelgan de un hilo

Tan delgado que nadie lo ve,

Nos damos la vuelta y seguimos

Mirando detrás de nuestra espalda.


¿Quien jala el gatillo?,

En esta ciudad nadie nos mira,

Nadie nos busca, sentados en los

Parabuses somos parte del mobiliario

Prescindible, las lágrimas son parte del agua

Y el agua se va a las alcantarillas.


¿Qué merece la pena

De no llegar de noche a casa?,

Con la cabeza molida, las piernas molidas,

Las manos molidas, el sabor de no saber,

Corazón que no siente, ojos que no ven,

¿Quien se merece una llamada o silbido?


Y nada cambio,

El mundo sigue sin curso,

Sin nosotros, sin las rosas,

Sin los parabuses, sin heridas,

Sin palabras, sin miradas.

Ese es el llamado o silbido

Esa es la señal.